Entrar en una cámara de fotos: acción artística con estenopeica gigante en La Maleta.

Cuando el arte y la fotografía se encuentran en una habitación oscura

¿Cómo se forma una imagen dentro de una cámara de fotos? Esta fue la pregunta que dio origen a una instalación interactiva desarrollada en La Maleta, espacio de acción artística. En lugar de explicarlo con teoría, decidimos convertirlo en una experiencia inmersiva.

Tras barajar ideas como encoger a los visitantes con un rayo láser —una fantasía cinematográfica ya explorada—, surgió una propuesta más tangible y poética: transformar una habitación entera en una cámara estenopeica gigante.

La habitación que revelaba el mundo

Convertimos una sala en una cámara oscura real. Tapamos las ventanas, dejamos solo un pequeño orificio estenopeico en uno de los muros y preparamos el interior para que los visitantes pudieran entrar, observar y experimentar cómo se proyectaba el exterior… al revés y en movimiento.

La luz que entraba por ese diminuto orificio proyectaba sobre las paredes la imagen del exterior con todo su detalle: coches circulando, personas caminando, árboles moviéndose. Todo en tiempo real, pero de forma invertida, como sucede dentro de cualquier cámara fotográfica.

Una experiencia para ver como ve una cámara

La instalación no solo tenía valor artístico, sino también pedagógico. Quienes entraban en la habitación estenopeica comprendían, sin necesidad de palabras, cómo se forma una imagen dentro de una cámara, cómo funciona la luz, el tiempo de exposición, y el poder de la observación pausada.

La fotografía analógica como lenguaje artístico

Esta acción forma parte de una línea de proyectos centrados en el valor de la fotografía analógica y sus procesos como medio de creación artística. En tiempos de inmediatez digital, la cámara estenopeica nos recuerda que ver, mirar y captar lleva su tiempo.